Despiertas, sientes la necesidad de moverte o gritar, parece que alguien estuviera presionando tu pecho, quieres salir corriendo, no puedes. Al parecer tu mente está consciente pero tu cuerpo sigue dormido. ¡No pasa nada! Sólo fue un episodio de parálisis del sueño. ¿Quieres saber de qué se trata la parálisis del sueño y por qué sucede con más frecuencia de lo que pensamos? Desde TENA Colombia, te invitamos a seguir leyendo este artículo y conocer más sobre el tema.
¿Qué es la parálisis del sueño?
Aunque ya te dimos un abrebocas de lo que significa la parálisis del sueño, tener este tipo de sensaciones una vez en la vida o con regularidad, también tiene una explicación científica. Pues durante el sueño, nuestro cerebro pasa por varias etapas, incluidas las fases de sueño REM y no REM. La parálisis del sueño, generalmente ocurre cuando una persona se despierta repentinamente de la fase de sueño REM, que es la fase en la que el organismo se recarga, el cerebro está activo y ocurren los sueños más vívidos.
Aunque pueda ser una experiencia traumática y tenebrosa para quien lo vive por primera vez, la parálisis del sueño no tiene ninguna afectación física, y todo volverá a la normalidad al cabo de unos segundos o minutos, ¡no desesperes!
Causas de la parálisis del sueño
Cualquiera de nosotros puede experimentar parálisis del sueño al menos una vez en la vida, sin una causa justificada. Aún no está completamente estudiado el porqué de estos episodios, sin embargo, estos factores pueden influir en este tipo de experiencias:
Trastornos del sueño: algunas condiciones como la narcolepsia, (somnolencia diurna excesiva) principalmente, pueden aumentar el riesgo de parálisis del sueño. Este trastorno afecta los patrones de sueño normales y la calidad del descanso en general.
Dormir boca arriba: hay quienes relacionan esta postura con más probabilidad de experimentar parálisis del sueño. Expertos recomiendan dormir de lado.
Antecedentes familiares: si tienes padres, abuelos o hermanos que, a menudo, tienen parálisis del sueño, es probable que tú también lo vivas.
Desajustes en el horario del sueño: con mayor prevalencia en personas que no duermen siempre a la misma hora, que por temas laborales, deben rotar sus jornadas diurnas y nocturnas, o incluso, en viajeros que con frecuencia experimentan el jet-lag.
Alteraciones emocionales: episodios de estrés, ansiedad o depresión, también pueden aumentar la probabilidad de parálisis del sueño.
Sustancias psicoactivas o medicamentos específicos: de ser así, es mejor que consultes con tu médico especialista este tipo de repercusiones.
Síntomas de la parálisis del sueño
Seguramente, en el momento en el que lo enfrentes, ¡sabrás de qué se trata! La parálisis del sueño se trata de un fenómeno bastante peculiar que incluso puede ser difícil de olvidar. Te contamos cuáles son sus principales signos o síntomas:
Estar despierto y no poder mover tu cuerpo o hablar. Lo único que se mueve son tus ojos. Aunque con menos prevalencia, también puedes experimentar un episodio de parálisis del sueño cuando te estás quedando dormido.
Sentir una presencia extraña en tu habitación, sin embargo, en muchos casos, sólo son alucinaciones que se tienen.
Aunque suene bastante espeluznante, también puedes presentar dificultad para respirar o que tienes algo encima que te está presionando el pecho.
Sudoración mientras estás teniendo la parálisis del sueño.
Sensación de angustia o miedo, pues muchas personas experimentan estas emociones intensas durante un episodio de parálisis del sueño.
Tratamiento de la parálisis del sueño
La parálisis del sueño no es una condición que necesite tratamiento, sin embargo, depende del paciente. Por ejemplo, si una persona está teniendo episodios muy repetitivos que le causan emociones fuertes, sensaciones incómodas y, a largo plazo, no logra acoplarse a ellas, el médico puede sugerir algunos cambios en el estilo de vida y además, recetar medicamentos específicos para reducir la fase REM. Aún así, si el paciente opta por no seguir un tratamiento, no habrá ningún riesgo de por medio.
Tipos de parálisis del sueño
Según la frecuencia y las sensaciones que experimentes, la parálisis del sueño se clasifica de tres maneras:
Aislada, que aparece en cualquier momento sin ninguna causa aparente. Es el tipo de parálisis del sueño más común.
Recurrente, que, como su nombre lo indica, la condición se repite con mayor frecuencia y puede estar relacionada con un trastorno del sueño como la narcolepsia, por eso en estos casos se recomienda visitar al especialista para descartar cualquier condición.
Alucinación, este tipo de parálisis, a su vez se divide en tres tipos específicos, según blog de la revista Medical News Today; parálisis del intruso, en la que sientes que hay una presencia extraña o un ente que quiere hacerte daño, pueden verse algunas sombras o escucharse sonidos tormentosos; parálisis del íncubo, en la que sientes que no puedes respirar porque hay algo o alguien ejerciendo presión sobre tu pecho; y finalmente, parálisis vestibular, en la que siente que estás flotando o saliendo de tu cuerpo.
Consejos para dormir mejor
Ahora bien, si alguna vez has tenido este tipo de episodios mientras duermes o estás empezando a experimentar la parálisis del sueño de manera recurrente, estos consejos pueden ser de tu interés y brindarte más beneficios a la hora de dormir:
Haz todo lo posible por tener un horario específico del sueño, y dormir entre 7 u 8 horas durante la noche. A menudo, los trastornos de sueño están relacionados con la falta de sueño.
Intenta generar un ambiente de calma, oscuro y tranquilo a la hora de dormir.
Evita utilizar aparatos electrónicos como celulares, tablets, televisores o computadores antes de ir a dormir, ya que la luz de estos dispositivos suele interrumpir la producción de la hormona melatonina que es la que permite que tengamos un descanso reparador.
Practica alguna actividad relajante antes de ir a la cama. La lectura, meditación, el journaling o tener una playlist para dormir, pueden ayudarte a liberar el estrés acumulado del día, y por ende, que tengas un mejor descanso. También, puede funcionar tomar un té relajante o baño caliente.
Desde TENA, queremos que tus noches estén llenas de calma y bienestar y que limites al máximo cualquier experiencia traumática que pueda interferir en tus hábitos de descanso, como lo es la parálisis del sueño. Así que, te invitamos a seguir nuestras recomendaciones y a estar informado sobre esta condición.
Fuentes
https://www.medicalnewstoday.com/articles/es/paralisis-del-sueno
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