La cistitis es una infección bacteriana o también llamada “infección urinaria”, en la vejiga o el tracto urinario, que la mayoría de las mujeres sufren por lo menos una vez en la vida, ésta es diagnosticada por medio de una prueba de orina. Una infección en la vejiga puede ser dolorosa, y puede volverse un problema de salud grave si se extiende a los riñones.
Síntomas de la cistitis
La cistitis es mucho más común en mujeres que en hombres, ya que la uretra femenina es mucho más corta que la masculina, además está cerca de la vagina y el recto. Algunos de los síntomas de la cistitis son:
Dolor intenso sobre la vejiga.
Dolor, dificultad y ardor al orinar.
Orinar frecuentemente pequeñas cantidades.
En algunos casos, puede presentar fiebre, orina turbia acompañada de sangre.
Los síntomas de la cistitis tienden a desaparecer entre 24 y 48 horas después de iniciado el tratamiento, pero pueden durar varios días en caso de que no se vaya oportunamente a un especialista.
Si tienes alguno de estos síntomas debes acudir al médico para que te recete un tratamiento, ya que, de no ser tratada, la cistitis puede progresar a una infección en los riñones.
Causas de la cistitis
La cistitis es causada por una bacteria que se encuentra fuera del cuerpo e ingresa en las vías urinarias a través de la uretra. La mayoría de los casos de cistitis se producen por la bacteria E.coli. Las infecciones bacterianas en mujeres pueden aparecer como resultado de relaciones sexuales, por eso es recomendable orinar antes y después de tener relaciones.
La cistitis también puede ser causada por factores no infecciosos, que no involucran la presencia de bacterias en la vejiga. Algunas de las causas no infecciosas de la cistitis incluyen:
Irritantes químicos: El contacto con ciertos productos químicos puede irritar la vejiga y causar inflamación, como los productos de higiene femenina, los espermicidas y los productos de limpieza.
Medicamentos: Algunos medicamentos pueden irritar la vejiga y provocar cistitis como efecto secundario, como los diuréticos y los antihistamínicos.
Lesiones: Una lesión en la zona de la pelvis o en la columna vertebral puede afectar la función de la vejiga y provocar cistitis.
Problemas estructurales: Algunas personas nacen con una estructura anormal en la zona de la pelvis que puede afectar el funcionamiento de la vejiga y causar cistitis.
Condiciones médicas: La cistitis también puede ser un síntoma de otras condiciones médicas, como la cistitis intersticial, la enfermedad inflamatoria pélvica y el síndrome de la vejiga dolorosa.
Cuerpos extraños: La introducción de cuerpos extraños en la vejiga, como sondas urinarias o dispositivos de control de la incontinencia, puede causar irritación e inflamación de la vejiga, lo que a su vez puede llevar a una infección urinaria y cistitis.
Radiación: La radioterapia para tratar el cáncer en la zona de la pelvis puede dañar la vejiga y provocar cistitis. Esto ocurre porque la radiación puede afectar las células sanas de la vejiga y hacer que se inflamen y dañen.
Tratamiento para la cistitis
El tratamiento de cistitis consiste en tomar antibiótico por vía oral en casa, entre 7 a 14 días, es importante tomar todas las dosis prescritas, así comience a sentirse mejor.
Es fundamental recordar que el tratamiento para la cistitis debe ser prescrito por un médico especialista en urología o enfermedades infecciosas. Si se experimentan síntomas de cistitis, es importante no automedicarse y buscar atención médica de manera inmediata.
Además, aunque la duración típica del tratamiento es de 7 a 14 días, la duración y el tipo de antibiótico varían según la gravedad de la infección y la salud general del paciente. Es crucial tomar todas las dosis prescritas, incluso si los síntomas desaparecen antes de terminar el tratamiento, para evitar que la infección se vuelva resistente a los antibióticos.
Cabe destacar que, aunque existen remedios caseros y suplementos que pueden ayudar a aliviar los síntomas de la cistitis, no deben ser utilizados como tratamiento principal. Además, ciertos remedios caseros pueden incluso empeorar los síntomas o interferir con los medicamentos recetados por un médico.
Hay algunos tips para evitar y combatir la cistitis:
Tomar abundante agua, entre 2 y 3 litros por día.
Tomar jugo de arándanos rojos para reducir el riesgo de infección.
No consumir bebidas ricas en azúcar ni bebidas alcohólicas, éstas irritan las vías urinarias.
Orinar en cuanto tengas ganas.
Incrementar las medidas de higiene, limpiar siempre de adelante hacia atrás.
Orinar antes y después de tener relaciones sexuales.
Evitar usar desodorantes en aerosol o productos femeninos en la zona genital; pueden causar irritación, especialmente si tienen perfume.
La cistitis puede ser evitada y fácilmente controlada con las medidas mencionadas. Tener una buena higiene y tomar los medicamentos de la manera indicada.
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