Mover el cuerpo debe ser una prioridad para todas las personas: es el vehículo en el que tenemos el regalo de poder experimentar todas las sensaciones que nos da la vida. Sin embargo, moverlo no significa necesariamente hacer muchísimo ejercicio, tanto en cantidad como en rigurosidad.
Es posible que la mayoría de las personas no le demos la suficiente importancia a los ejercicios de estiramiento que deberíamos hacer todos los días al despertar, antes y después de pararnos de la cama.
Beneficios de estirar en la mañana
Todas las personas, conscientes o no, estiramos los músculos cuando nos despertamos. Es lo que se llama coloquialmente desperezarse. Sin embargo, aquí queremos enseñarte algunos tips para que hagas esta actividad cotidiana de manera segura y pautada, para que puedas tener el placer de empezar el día consciente y presente.
Realizar estiramientos al despertar nos ayuda a tener los músculos preparados para todas las actividades del día. Además, a largo plazo nos permite mejorar la flexibilidad y aumentar la capacidad de movimiento.
Importancia de saber estirarse al despertar
No podemos hacer estiramientos al despertar si no estamos preparados e informados, porque podríamos generar dolores o lesiones en nuestro cuerpo.
Si todo eso te interesa, puedes ir a este video de Facebook de Actívate con TENA, que habla un poco sobre ejercicios al levantarse.
Algunos consejos que son muy valiosos para empezar a realizar los estiramientos:
¡Despiértate primero!: no empieces los estiramientos hasta que estés seguro de que estás totalmente despierto y presente en el momento.
Consulta a tu médico: si tienes alguna lesión, condición o enfermedad particular, es importante que acudas a un profesional de la salud antes de realizar cualquier ejercicio físico.
Sé constante: hacerlos una vez cada mes no sirve… tienes que volverlos parte de tu rutina diaria.
Conoce estos estiramientos perfectos para inicar el día
Cuando estés seguro de que estás completamente despierto, haz consciente cada una de las partes de tu cuerpo, empezando desde las plantas de los pies, subiendo por las piernas, la cadera, pasando por el abdomen, la espalda, los brazos, las manos; para llegar al cuello, subir a la cabeza y terminar por la frente.
Ahora, ¡estás listo para hacer estiramientos al despertar!
Estiramientos en la cama
Quítate la cobija o la sábana, para que tengas suficiente espacio y no te vayas a enredar.
Empieza flexionando las piernas: primero levanta las rodillas y los pies, y luego, con las rodillas en el aire, sube y baja los pies, gira los tobillos y muévelos en círculos.
Repite un movimiento similar con los brazos, los codos, las muñecas y las manos.
Después, siéntate lentamente en la cama. Gira tu cuello lentamente hacia la derecha y luego hacia la izquierda. Relaja los hombros y gíralos. Procura sentir cómo cada parte de tu cuerpo se prepara para el día.
Estiramientos al ponerse de pie
Cuando ya estés de pie, puedes empezar una rutina de estiramientos más completa:
Estira el cuello: inclínalo hacia los lados sin movimientos extremos. Puedes ayudarte con las manos. Hazlo también hacia adelante y hacia atrás.
Estira las piernas: el grado de complejidad de estos estiramientos al despertar lo escoges tú. Puede ser tan sencillo como hacer un par de sentadillas o tan complejo como sentarte en el piso y hacer “mariposa” con las rodillas.
Estira la espalda: para esta parte del cuerpo debes tener especial cuidado, porque puede lesionarse con mucha facilidad. La idea es que encuentres un ejercicio que libere toda la tensión acumulada a lo largo de la noche.
Estira los brazos: sucede lo mismo que con las piernas, ¡depende de ti!
No te olvides de acompañar todos tus estiramientos y ejercicios con agua, para que mantengas tu organismo muy sano. Si quieres conocer los beneficios de mantenerse hidratado, te recomendamos este artículo ¡Es hora de hidratarse!
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